Para iniciar nuestro Rector hizo una breve introducción sobre la importancia del educador marista, destacando el sentido de vigilancia preventiva, que implica: estar, estar cercano, estar con alegría, desarrollar la esencia de cada niño y niña para que puedan construir su propio proyecto de vida en plenitud, como personas libres, creativas y solidarias.

El rol del tutor es fundamental, ya que acompaña el proceso educativo dentro y fuera de las aulas, recordando el pensamiento del Padre Champagnat, educar es motivar el desarrollo integral de la persona, cultivando todas sus dimensiones. Es facilitar al joven la consecución de los valores que lo humanizan y personalizan, tales como la sociabilidad, la libertad, la responsabilidad, la trascendencia, para llegar a ser "buenos cristianos y virtuosos ciudadanos"

En un ambiente de oración, se mostró un video motivacional a los tutores y cada Director de Sección hizo entrega de el Anuario Satélite 2013, junto con el calendario de la Congregación.

Felicitamos a todos los tutores y encomendamos este trabajo que recién comienza en las manos de Jesús, nuestro Padre Fundador San Marcelino y de nuestra siempre bondadosa Buena Madre.